En un bosque encantado vivía una
hadita triste y solitaria que se llamaba Fay. La hada lo tenia todo,
hermosura, bondad y riqueza, ya que era una de las hadas mas queridas
por la Gran Hada Mágica. Pero en su corazón no había alegría, porque le
faltaba lo mas importante: el Amor. La
Gran Hada que se llamaba Odelina estaba muy preocupada por ella, porque
sus alas cada vez tenían menos brillo y de los ojos de Fay salían
lágrimas que se convertían en rubíes. Odelina estaba muy preocupada por la tristeza de Fay y la mandó llamar:
-¿ Dime que te pasa linda hadita?- Gran Hada siento mi corazón vació y no encuentro con que llenarlo, ¡por favor ayudame Odelina!
-¿ Dime que te pasa linda hadita?- Gran Hada siento mi corazón vació y no encuentro con que llenarlo, ¡por favor ayudame Odelina!
La
Gran Hada era conocida en todo el bosque por su gran sabiduría y
bondad, por lo tanto merecedora de tal petición, miró a los ojos de Fay y
le contesto:
- Fay existe
una flor en el bosque muy poderosa que si aspiras su perfume te dirá lo
que tu corazón anhela, ve linda hada búscala, es azul como tus lindos
ojos y fría como lo es ahora tu corazón.
El
hada salio al amanecer a buscar la extraña flor, caminó durante varios
días ya que sus alas no podían volar debido a la tristeza que se habían
adueñado de ellas, camino varios días y llego al final de el bosque
encantado, de pronto vió a un duende que estaba recogiendo frutos y le
pregunto:
- Dime amable duende conoces una flor azul que es mágica y devuelve el amor a las hadas?
- Sí linda hada, las vi una vez pasando esos arbustos de allí pero en ese lugar habita un ser mágico, ten cuidado.
- Muchas gracias duende tendré mucho cuidado. Fay se despidió del duende y siguió su camino.
Llegó a un paraje muy hermoso donde había una cascada de aguas cristalinas. Fay se puso muy contenta porque por todas partes habían flores mágicas de color azul , las mismas que le había dicho la Gran hada del Bosque. Cuando se disponía a coger una flor escucho un triste lamento, Fay se adentro en el paraje y encontró detrás de un matorral un elfo muy hermoso que lloraba desconsoladamente. Al ver al hada se asusto muchisimo dando un gran salto hacia atrás.
Llegó a un paraje muy hermoso donde había una cascada de aguas cristalinas. Fay se puso muy contenta porque por todas partes habían flores mágicas de color azul , las mismas que le había dicho la Gran hada del Bosque. Cuando se disponía a coger una flor escucho un triste lamento, Fay se adentro en el paraje y encontró detrás de un matorral un elfo muy hermoso que lloraba desconsoladamente. Al ver al hada se asusto muchisimo dando un gran salto hacia atrás.
- No te voy a hacer ningún daño, vine
aquí a buscar una de estas flores porque mi corazón es frio y la Gran
Hada me dijo que me pueden curar y seré capaz de sentir Amor.
- Hada eres muy linda, pero no creo que estas flores te puedan ayudar.
- Hada eres muy linda, pero no creo que estas flores te puedan ayudar.
Fay se puso muy triste, pero no se iba a rendir y le preguntó al ser mágico:
- Dime bello elfo ¿ porque me dices eso?
- Lo mismo intente yo bella hada pero no sirvió de nada , mi corazón sigue igual, frio y triste como el hielo invernal. La hadita se conmovió y acaricio el pelo dorado del elfo y le dijo :
- No estés triste, encontraremos la manera de que nuestros corazones sean alegres, bello elfo.
- Dime bello elfo ¿ porque me dices eso?
- Lo mismo intente yo bella hada pero no sirvió de nada , mi corazón sigue igual, frio y triste como el hielo invernal. La hadita se conmovió y acaricio el pelo dorado del elfo y le dijo :
- No estés triste, encontraremos la manera de que nuestros corazones sean alegres, bello elfo.
Pasaron los días, los meses, en absoluta armonía, ya que los dos eran muy felices juntos y construyeron una linda cabaña, donde se contaron todos sus secretos y sin darse cuenta sus corazones fueron uno. Un día fueron a coger frutos al bosque, cuando de repente Artanis, que así se llamaba el elfo, escucho algo: un oso les llevaba siguiendo para devorarlos a ambos. Fay pegó un grito cuando descubrió al oso tras ellos entonces, Artanis sacó su arco con gran cuidado y apunto al gran oso, pero se movía mucho y tenia miedo de herir a Fay, cuando de repente ocurrio algo muy hermoso, Fay echo a volar y sus alas desprendieron una luz que cegaba , fue hacia Artanis lo cogió y volaron juntos hacia la cabaña sanos y salvos.
Al llegar les estaba esperando Odelina muy sonriente que les dijo:
-¿ No os dais cuenta que vuestros corazones ya no son fríos que están llenos de amor? te mande a este lugar Fay porque sabia que junto nuestro amigo el Elfo a tu corazón se le caería su fría coraza.
- Oh Gran Hada gracias por tu sabiduría. Las dos hadas se abrazaron y la Gran hada se despidió de ellos deseándoles muchas felicidad. Los corazones de Artanis y Fay nunca mas fueron tristes porque rebosaban felicidad, alegría y fueron felices en aquel paraje hasta el fin de los tiempos.
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